LAS MEMORIAS DE UNA ENFERMA DEL MANICOMIO DE LA SANTA CREU, DE BARCELONA, ESCRITAS EN SERVILLETAS DE PAPEL.

Portada del libro que recoge los escritos de  la Manuela.

Una de las páginas del libro.

Atendido que  en el día hoy,  10 de octubre se celebra el DIA MUNDIAL DE LA SALUD MENTAL, que tiene por objetivo la concienciación acerca de los problemas de la salud mental en todo el mundo, he considerado conveniente  aprovechar el evento para referirme a las memorias de una enferma del Manicomio de la Santa Creu, de Barcelona, que escribió en su día en servilletas de papel.

Manuela fue una de las enfermas del antiguo Institut Mental de la Santa Creu, de Barcelona. Nacida en el año 1931, ingresó como paciente en régimen diurno poco antes de cumplir los cuarenta años de edad, y dejó escrita su historia en  servilletas de papel, que posteriormente el Arxiu Històric de Roquetes - Nou Barris, transformó  en el tercer libro que ha publicado.

Fue Mercedes Hidalgo, una trabajadora del Instituto Mental de la Santa Creu, que la animó a dejar su testimonio, atendido que " A la Manuela le gustaba mucho  escribir. Escuchaba programas de radio y siempre anotaba las frases y cosas que no deseaba olvidar" -- explica Mercedes, que recuerda que siempre compraba paquetes de servilletas de papel  que utilizaba para escribir. Y un día le dijo: "¿Porqué no escribes tu historia?.

A los 37 años de edad, la vida de Manuela se trastornó. La despidieron de la fábrica textil donde trabajaba  a consecuencia de sufrir un accidente con una de las máquinas, y como sea que residía en el barrio de Can Peguera, muy cerca del Institut Mental de la Santa Creu, la ingresaron allí, solamente en régimen diurno, de manera que marchaba a dormir en su casa.

Mercedes ha explicado que  "  En los escritos que nos ha dejado, habla de las muchas dificultades que tenía, especialmente  con el tema de conseguir  comida. Ella era una muy buena cocinera, y siempre nos llevaba  platos cocinados por ella, y nos cuidaba mucho".

DIBUJOS DE CINCO PACIENTES INTERNOS

Arxiu Històric Roquetes - Nou Barris  hizo en su día, coincidir  las Memorias de la Manuela con la inauguración en l'Espai  Via Favència de una exposición de dibujos, realizados en la década de los años sesenta del pasado siglo, por cinco pacientes del Institut Mental de la Santa  Creu. " Es un material que se rescató porque lo tiraron cuando se  desmanteló aquella institución. La falta de ética y las prisas, fue la causa de que se perdieran los historiales de los enfermos y sus pertenencias -- lamenta la Mercedes -- Y todo lo que se conserva es gracias a un trabajador  que  recogió lo que pudo y que ahora está guardado  en el archivo".

Estos dibujos, de tendencia realista y con un toque de comicidad, junto con los escritos de la Manuela, constituyen hoy en día un valioso testimonio de la vida existente detrás de los muros del antiguo Institut Mental de la Santa Creu.

  

EL INSTITUT MENTAL DE LA SANTA CREU FUE, HASTA EL AÑO 1978, EL GRAN MANICOMIO DE BARCELONA

 El Manicomi de la Santa Creu, nombre original del Institut Mental de la Santa Creu, fue construido en el año 1885 con la finalidad de  alejar a las personas con enfermedad mental del centro de la ciudad. Esta circunstancia a mi me recuerda,  personalmente cuando,  en el año 1853, el Gobernador Civil de la Provincia de Barcelona, ordenó al Dr. Antonio Pujadas y Mayans que en el plazo de 24 horas abandonara , con sus enfermos mentales, la Casa de Baños y Manicomio  de la barcelonesa calle de Santa Anna esquina con Bertrallans, a consecuencia de las quejas recibidas del vecindario, estableciéndose, dentro del plazo fijado, en Sant Boi de Llobregat, fundando el Instituto Manicómico de San Baudilio de Llobregat.

Durante un siglo, y especialmente con anterioridad de la Guerra Civil española, las personas enfermas que ingresaban en el Manicomi de la Santa Creu, procedían de familias de clase social media y alta, atendido que era una institución privada. Había pensionistas de primera, de segunda y de tercera clase, incluso un chalet para pensionistas distinguidos.

El Dr. Josep María Comelles, psiquiatra y catedrático de antropología, estuvo trabajando en este centro como médico residente, desde el año 1973 al 1976, y vivía, como los demás residentes, en el piso superior. En aquella planta  había vivido, tradicionalmente, el médico de guardia con su familia, atendido que Barcelona quedaba a seis kilómetros de distancia.

El Manicomi de la Santa Creu fue,  entre los años 1885 y  1986, una de las construcciones más representativas de la arquitectura psiquiátrica europea. Después del Castillo de Montjuic era el edificio más grande de la ciudad de Barcelona.

La entrada  al edificio era el claustro principal, el espacio más grande. Había un teatro y una sala de recepción  para los pensionistas, todo ello decorado con mobiliario de alta calidad. Había también un jardín modernista muy bien cuidado, que mantenían los asilados.

En el año 1978 el establecimiento se cerró, y los vecinos se apresuraron  a solicitar que aquella construcción  se convirtiera en equipamiento para el barrio, y actualmente es la sede del distrito de Nou Barris.

                                     

El antiguo Manicomio de la Santa Creu, actualmente sede del distrito barcelonés de Nou Barris.