lunes, 10 de junio de 2019

SUBIR AL PEDRAFORCA, UN SUEÑO QUE NO HE PODIDO VER REALIZADO.








En mis años de adolescencia, había practicado con cierta frecuencia el montañismo junto con un grupo de compañeros. En dos ocasiones, tuve  oportunidad de subir al Pedraforca, en meses de verano, pero por circunstancias diversas no me fue posible, y en el resto de mi vida las obligaciones familiares no lo posibilitaron, y menos ahora, con las limitaciones físicas propias de la edad. Consecuentemente, un sueño no realizado, como tantos otros en esta terrenal existencia, que hacen cierto aquel refrán popular de " El hombre propone y Dios dispone" y que, en su recuerdo, cuelgo este post en la recta final de las aportaciones en mis blogs de Internet.

Etimológicamente, el nombre de Pedraforca procede del latín (petra forca), por la forma de horca que tiene la  emblemática montaña catalana, situada entre los términos municipales de Saldes y Gósol, en la comarca del Berguedà, en el Parc Natural del Cadí - Moixeró y declarado Paratge Natural d'Interés Nacional.

Tiene una forma muy peculiar, formada por dos carenas paralelas unidas por un cuello. El Pollegó Superior tiene una altura de 2.506,4 metros , y el Pollegó Inferior 2.444,8 metros respectivamente. 

4 comentarios:

  1. Querido Joan, no haber subido al Pedraforca, te ha permitido alcanzar otras cimas de más difícil escalada, cómo la vida y la responsabilidad familiar. Esa es la montaña más alta del planeta y la de mayor recompensa al ser coronada. Los sueños dejan de serlos cuando se cumplen, por eso no haberlos cumplido, te permite seguir soñando, no hay nada más hermoso que tener sueños y el pedraforca no te ha robado el tuyo. Sigue soñando amigo mío, porque soñar es sano. Un abrazo.

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    1. Si Carlos, en esta vida nos proponemos muchas cosas, y algunas de ellas, por motivos distintos, no podemos verlas realizadas. Sería demasiado bonito que consiguiéramos todo lo que nos proponemos. Un fuerte abrazo.

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  2. A la VIDA no es pot haver tot, a mes quant ens fem grans, per les malalties, anem sense adonar-nos deixant coses, il·lusions que ens agradaria haver fet. Per mostra un boto. Amb 58 anys vaig deixar de treballar, dos anys al paro i una pre-jubilació els 60 anys. La meva dèria era conèixer les espanyes, vaig comprar una Volkswagen T3 Camper del 1989. No vaig res de res. Son coses que a la VIDA anem deixat, a vegades sense adonar-nos compte. Això si perduren en la nostre memòria. Com tu el Pedraforca. Gracies amic Joan, aquest post del 10 de juny, entrarà per la porta gran el meu llibre Reculls 2019 pagines 81,82,83, Josep

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    1. Cert Josep, la Vida té cops amagats, i a vegades les malalties ens recorden la fragilitat d'aquest cos humà que tenim. Sempre he dit que hem d'acceptar de bon grat tot alló que la Vida ens presenta. L'acceptació no significa que ho tinguem tot solucionat, però si que ens ajuda a afrontar les dificultats d'una manera molt diferent. Una forta abraçada.

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