Refugiados republicanos en el campo de Areglers (Francia). (1939 - 1941)
Dentro de los actos de Conmemoració del Bombardeig i del Foment de la Pau, el Ayuntamiento de la Garriga contará el próximo sábado, dia 5 de marzo, con la visita del historiador de Perpinyà, Grégoy Tuban, experto en el exilio republicano en Francia, que ofrecerá una charla - debate en el Auditori de l'Escola de Música, a las 18:00 horas, con la proyección del documento "Camp d'Argelers 1939-1941" .
Nacido en Sant Brieg (la Bretanya), en 1973, es descendiente de una familia de la Catalunya del Nord por parte paterna. Ejerce la profesión de periodista en Perpinyà y ha escrito numerosos artículos sobre la retirada de republicanos en la Guerra Civil española, y ha participado en numerosas iniciativas encaminadas en mantener viva la memoria de aquellos tristes episodios.
El campo de Argelers permanece vivo en la memoria colectiva catalana y española, independientemente de si las familias han vivido en la Catalunya franquista como si lo han hecho en el exilio, por donde pasaron republicanos, brigadistas alemanes, austríacos, italianos, americanos; "extrangeros" poloneses, ucranianos, belgas, gitanos y judíos.
EL CAMPO DE ARGELERS
La playa francesa de Argelers conoció uno de los periodos más trágicos de su historia. En el transcurso del invierno de 1939, las autoridades francesas instalaron, a toda prisa, en las arenas de aquella playa, un campo destinado a la acogida de los miles de refugiados republicanos españoles, cifrados en unos 100.000, que huían de la Guerra Civil española y del régimen militar de Franco.
Hombres, mujeres y niños, desprovistos de los más elementales medios, después de atravesar los Pirineos, fueron dirigidos hacia el litoral y acogidos en espera de ser evacuados hacia otros lugares. Argelers fue la primera playa que recibió a los exiliados. El campo fue rápidamente vallado con alambre de espino, y se extendió desde el actual Hotel del Lido hasta el Camping Rossellonès.
Sin embargo, muy pronto, las autoridades francesas fueron desbordadas por el constante número de personas que iban llegando, y en consecuencia decidieron adecuar otros campos, en las playas de Sant Cebrià de Rosselló y el Barcanès.
Los refugiados de estos campos recibieron trato de prisioneros de guerra, y eran vigilados por miembros de la Legión Extrangera Francesa, que se caracterizaban por su dureza con los refugiados.
Actualmente, las residencias y los edificios, han sustituído a los barracones, y no queda el más mínimo indicio del "Camp dels Espanyols". Solamente, el monumento levantado a la altura del Hotel del Lido y el cementerio situado en las proximidades de l'Avinguda de la Retirada, recuerdan la localización de aquel lugar de reclusión de tan triste memoria.
Els humans al llarg de la nostre VIDA! Vivim històries repetides, ves tu, els milers de refugiats que entren a Europa, ningú s’és quinze les vestidures per ells. Els refugiats són repudiats ara i sempre. Josep
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