Se cumple en el día de hoy, ciento once años de la inauguración de los tramos de la red de alcantarillado en la ciudad de Barcelona, correspondiente a las calles de Entença, Rocafort, Calabria y Borrell, entre la Gran Via de les Corts Catalanes, que en aquella época se denominaba calle de las Cortes, y Consell de Cent.
El acto estuvo presidido por el alcalde Domènec Sanllehy, acompañado de miembros de su Consistorio, así como otras autoridades locales. arquitectos, representantes de los medios de comunicación social de la ciudad e invitados que, junto con una multitud de ciudadanos, se concentraron en las confluencias de las calles Rocafort con Consell de Cent.
Procedencia: Ilustración Catalana (1907). Foto: Adolf Mas
Como puede apreciarse en esta fotografía, la entrada a la red del alcantarillado fue adornada con enramadas que rodeaban la rampa de acceso, para poder descender al subsuelo y recorrer el túnel de la red en toda su extensión. Como recoge una crónica de "La Vanguardia", el tramo inaugural fue iluminado con bombillas eléctricas, y con luces de acetileno las alcantarillas secundarias que vertían sus aguas negras en la principal que se inauguraba.
Los asistentes tuvieron ocasión de ver en funcionamiento dos vagonetas de recogida y transporte de residuos, que para aquella ocasión habían estado adornadas con flores y verde vegetación, e iluminadas también con luces de acetileno.
Finalizado el trayecto recorrido, la Comisión del Ensanche ofreció un "lunch" a los asistentes, en el interior del mismo alcantarillado.
Para ello, adosadas a una de las paredes, se extendió una larga hilera de mesas que ocupaba todo el tramo inaugurado. Manteles de hilo, cubiertos, vajilla de porcelana y copas de cristal, todo ello adornado con rosas y claveles.
Animado por los asistentes, el alcalde hizo un brindis y pronunció un entusiasta discurso, destacando que " ... el hecho de que el Ayuntamiento se preocupe de la higienización del subsuelo, no significa que Barcelona sea, como algunos pretenden, una ciudad malsana, en manera alguna; nuestra ciudad, por su clima y por sus condiciones naturales resulta, á no dudarlo, una de las más sanas. Si la comparación de las estadísticas demográficas de Barcelona con las de otras capitales extranjeras de su importancia, resulta que la cifra de su mortalidad es mayor tal vez se deba a que nuestras estadísticas son más aproximadas a la realidad que las otras".
Después de la tanda de discursos, los invitados ocuparon sus respectivos lugares en la mesa, donde se les sirvió, ofrecido por Casa Llibre, un menú de bocadillos " de pasta de brioix" variados, acompañados de cava, y finalmente fueron obsequiados con puros habanos.
En el exterior, en la calle, la multitud de curiosos, ante la incerteza de lo que se estaba cociendo bajo sus pies, oían murmullos como procedentes de ultratumba, mientras el humo de los habanos consumidos salía por la boca del alcantarillado.
Curiosamente, no he encontrado ninguna referencia a la presencia de los numerosos habituales habitantes de aquellos espacios:como pueden ser las ratas y otros roedores.
ResponderEliminar