¿ POR QUÉ LOS TAXIS SON DE COLOR AMARILLO Y NEGRO, EN BARCELONA?

 Martí Vidal i Pedrola fue el primer taxista autónomo de Barcelona, en el año 1912.

Parada de taxis en la terminal de la estación ferroviaria de Sants.

En la mayoría de las ciudades, los taxis suelen ser de colores neutros, por lo que resultan poco o nada llamativos. Sin embargo, en Barcelona, es muy distinto. Sus colores amarillo y negro los delata a distancia.

Los taxis no dejan de ser un símbolo más de Barcelona. Resultan inconfundibles y, de alguna manera, constituyen  a que la Ciudad Condal sea algo más especial. Pero, ¿por qué los taxis son de color amarillo y negro en Barcelona?.

Retrocediendo en el tiempo fue en el siglo XX cuando aparecieron los primeros taxis en Barcelona, sustituyendo a las antiguas calesas, de tracción animal.

Los primeros modelos de coches que se utilizaron como taxis, fueron fabricados por la Compañía Hispano - Suiza de Automóviles, y a partir del año 1910 empezaron a comercializarse hasta sustituir por completo a los coches de caballos.

Martí Vidal i Pedrola fue el primer taxista autónomo de Barcelona que empezó a ofrecer sus servicios desde el año 1912, en la confluencia de las calles de Aribau i Diputació.

Al ir aumentando el número de taxistas en la ciudad, hubo necesidad de establecer acuerdos y organizaciones, creándose siete años más tarde, en 1919, la Federación de Arrendatarios de Automóviles, y posteriormente el Ayuntamiento de Barcelona estableció el Código de Circulación, que obligaba a los taxistas a llevar  un taxímetro, así como una línea amarilla en sus vehículos, siguiendo así  la franja amarilla que llevan los taxis en la actualidad.

Poco a poco el sector del taxi se fue estabilizando, especialmente por el importante impulso que representó la Exposición Internacional de Barcelona de 1929, y en el año 1934 se decidió y determinó que fueran el amarillo y el negro los colores oficiales de los taxis de Barcelona, con el objetivo de eliminar las competencias internas.