Como continuación del post colgado en el día de ayer en este mismo blog, lo completo ahora reproduciendo la imagen de la Virgen del Pilar con los mantos de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios y de la Congregación de Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús.
Cada año, el día 8 de marzo, festividad de San Juan de Dios, la Virgen del Pilar luce el artístico manto donado por la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios.
Manto de la Virgen del Pilar de la Congregación de Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, regalado por la antigua provincia canónica de Barcelona, con el primer escudo artísticamente bordado de la Congregación, que luce cada año el día 31 de mayo, aniversario de la fundación de esta Congregación.
EL PILAR Y SU IMAGEN
El Pilar es una columna de jaspe de forma cilíndrica, que mide 1'67 metros de altura y 25 cms. de diámetro, forrada de bronce y plata, y cubierta por un manto desde los pies de la imagen de la Virgen hasta la base vista de la columna.
Encima del Pilar descansa la imagen de la Virgen, que es una escultura de estilo gótico tardío, franco - borgoñón del año 1435, atribuído a Juan de la Huerta, imaginero del municipio de Daroca.
La Virgen es una talla de madera dorada, que mide tan sólo 36 centímetros y medio de altura.
En la década de los años 50 del pasado siglo XX, ingresó en la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios un sacerdote de la Orden de San Camilo de Lelis, llamados “Ministros de los enfermos”, este sacerdote presumía de estar doctorado en DERECHO CANÓNICO, y como tal, cuando las circunstancias lo requerían usaba un “Bonete con Borla”, el Padre Enrique, que así se llamaba, mantenía y afirmaba que la Historia de la Virgen del Pilar no es dogma de Fe, y así un año el día de su festividad celebró para la Comunidad la MISA VOTIVA DE DIFUNTOS, en Sant Boi había varios hermanos de Zaragoza, recuerdo a uno que era de Borja y otro de Épila, y otro de Barbastro. Aquella noche la celda del padre Enrique apareció anegada, le habían dejado abierto el grifo del lavabo y además le habían lanzado la cama por la ventana.
ResponderEliminarInteresante relato Gabriel. No lo conocía.Enriquece los episodios históricos de la Orden de San Juan de Dios que, gracias a estas aportaciones quedan ahi, para mayor conocimiento general. Muchas gracias.
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