martes, 24 de agosto de 2010

FUTBOL CALLEJERO EN EL BARRI DELS VINYETS, DE SANT BOI DE LLOBREGAT, EN LOS AÑOS CINCUENTA.

De pie, de izquierda a derecha: Joan Ginabreda, Francesc Mas, Pepito Huertas,Carmelo, Pere Ráfols y Joan Palós.
Agachados, de izquierda a derecha: Caparrós, Emilio Urruela, Antoni Bellver, Estragués, Farrés (Cal Miquelito), Paco Corbalán.
(Fotografía facilitada por Francesc Mas. Obtenida por un fotógrafo callejero el día 30 de enero de 1953) Aspecto parcial de la Plaza de Catalunya, en la década de los años sesenta
(Foto: Joan Vendrell i Campmany)
En el lugar donde actualmente se encuentra ubicada la Plaza de Catalunya, en Sant Boi de Llobregat, había sido, hasta su urbanización, en la década de los años sesenta, un enorme descampado con una profunda torrentera (Torrent d'en Rosés) en uno de sus extremos.
En este espacio, la chiquillada del barrio dels Vinyets acostumbraban a jugar a fútbol cuando se disponía de un balón -- que no todos tenían --y que acostumbraba a llevar Francesc Mas (Cal Sardina), que disponía de un balón de cuero que hacía las delicias de todos sus compañeros.
La fotografía que encabeza estas líneas, corresponde a un momento puntual, concretamente el día 30 de enero de 1953 en que un fotógrafo callejero llamó a los muchachos que en aquel momento estaban corriendo tras el balón y los agrupó junto al muro de la pared de "Cal Terrelló", para sacarles la fotografía. En ella faltan algunos muchachos habituales en el juego, tales como Lluis Parés (Ca la Marciala), Siscu Zenón, Quimet Zenón, Lluis Moreno (Cal Satoca), Jordi Palós, y Joan Vendrell (Ca la Bacallanera), entre los que recuerdo.
Cuando el balón se precipitaba en el fondo del torrente, correspondía ir a recuperarlo al autor del desafortunado chut. El torrente estaba bordeado de vegatación propia del lugar, con predominio de zarzales y en cuyo fondo se acumulaba todo tipo de desperdicios y utensilios inservibles que arrojaban los vecinos que deseaban desprenderse de ellos, así como las basuras domiciliarias, que, en su conjunto, constituía un paraíso para los roedores, con predominio de ratas de gran tamaño.
En el otro extremo del descampado, frente a Cal Miquelito, había una parcela de sembrado junto a tres pinos piñoneros, que todavía permanecen en el mismo lugar, y en uno de sus extremos, una caseta de madera que en los meses de verano vendían sandías y melones (Corbalán).
De todos estos muchachos, uno es fallecido (Estragués), mientras que los restantes están en edades comprendidas entre los 64 y los 68 años de edad, y en conversaciones mantenidas con la mayoría de ellos con quien he tenido ocasión de contactar, coinciden en manifestar los gratos recuerdos que guardan de aquellos felices años de su infancia y adolescencia.

lunes, 16 de agosto de 2010

"VILLA EMILIA", DE SANT BOI DE LLOBREGAT, REQUISADA Y RECUPERADA DURANTE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA (1936 - 1939)







Fotos y documentos: Archivo Joan Vendrell i Campmany



A mediados del año 1932, mis abuelos maternos, Joan Campmany Costa y Emilia Pagés Munné, construyeron una torre en las afueras de Sant Boi de Llobregat, en la calle de Ignasi Iglesias (1), que en aquella época era una zona de descampados y en sus proximidades sólo existían dos casas pairales (Ca la Marciala y Ca la Molinera).

Mi abuela materna había nacido en Sant Boi de Llobregat (Barcelona) y bautizada en la Parroquia de Sant Baldiri el día 6 de diciembre de 1887. Cuando casó con Joan Campmany, de Sant Andreu de la Barca (Barcelona) fijaron residencia en la calle de Sant Medir, en la populosa barriada de Sants, de Barcelona, donde establecieron un comercio de Pesca Salada ( venta de bacalao, sardinas saladas, etc).

Cada semana, mi abuelo materno , junto con una de sus tres hijas, Pepita (mi madre) se desplazaban a Sant Boi de Llobregat con un camión Ebro y vendían los productos que comercializaban en el mercado al aire libre que se instalaba en la Rambla de Sant Boi de Llobregat. Por este motivo, cuando en los pueblos a la gente se les conocía con motes, a nosotros nos conocían por "Ca la Bacallanera" (por la venta de bacalao).

De ahí que en su día decidieran construir la torre en este municipio, a la que nos hemos referido, donde acudían, con sus tres hijas, a pasar los fines de semana y días festivos.

Cuando estalló la Guerra Civil española, el 18 de julio de 1936, el bando republicano abolió toda referencia que hiciera alusión a la Iglesia Católica, y entre otras actuaciones decretaron el cambio toponímico del municipio, que pasó a denominarse VILABOI, en lugar de Sant Boi de Llobregat.

Temerosos mis abuelos de que la torre sufriera daños , puesto que presidía en su fachada un monumental cuadro cerámico alusivo a la Virgen de Montserrat, Patrona de Catalunya, solicitaron la debida autorización para que pudiera ser retirado, y en consecuencia, el Comité de Defensa Antifascista emitió un escrito (ver la tercera imágen de la cabecera), autorizando a un albañil, Juan Roca " a retirar un cuadro de la fachada de la casa nº 17 de la calle Ignasi Iglesias", con fecha 31 de julio de 1936.

Los baldosines que componían el referido cuadro, fueron apilados y guardados en una de las habitaciones de la casa, con la esperanza de que, al finalizar la contienda fraticida, pudieran de nuevo ser colocadas en su lugar de origen.

Sin embargo, como ocurriera con otras propiedades, el Comité de Milicias Antifascistas no tardó en requisar la propiedad de mis abuelos, colocando, en lugar visible, el cartel que así lo indicaba (Ver la cuarta y última imagen de la cabecera). En consecuencia mis abuelos y sus tres hijas no pudieron acceder a esta propiedad en el transcurso de los tres años de la Guerra Civil.

Cuando las tropas del general Franco entraron en Barcelona el 25 de enero de 1939, el ejército republicano se batió en forzosa retirada, y fue entonces cuando mis abuelos pudieron recuperar su requisada propiedad, en cuyo interior no hallaron absolutamente nada, puesto que les habían sustraído el mobiliario, enseres, biblioteca con valiosos libros y demás objetos y materiales. Sólo encontraron, intactos, los baldosines amontonados que componían el cuadro de la Virgen de Montserrat, que se apresuraron a encargar nuevamente su colocación en la fachada (Ver fotografía general (primera imagen) y su detalle (segunda imagen).

Este cuadro permaneció en la referida fachada hasta que la torre fue demolida a finales de la década de los años 80 del siglo pasado, para dar lugar a la construcción de un nuevo inmueble.


(1) La calle de Ignasi Iglesias pasó a denominarse, durante el franquismo, calle del Crucero Baleares, y con la llegada de la democracia, Avenida de l'Onze de Setembre, que perdura en la actualidad, en la barrio de "Vinyets - Molí Vell".

Estuvo señala con el número 17 mientras fue Ignasi Iglesias; con el número 33 mientras fue Crucero Baleares, y en la actualidad, con los números 23 - 25 , y 27 como Avinguda de l'Onze de Setembre.

domingo, 1 de agosto de 2010

LA "COLONIA AMAT DE LA FONT DEL FERRO", SEGÚN EMILIO CARRERAS (AÑO 1929)

La "Font del Ferro" (Foto Emilio Carreras)
La pequeña capilla (Foto: Emilio Carreras)
Primera hoja del manuscrito de Emilio Carreras.

Fachada principal de la masía (08.08.1929)
(Foto: Emilio Carreras)






Vista general de la masía (Foto: Emilio Carreras)


Clasificando documentos que tengo guardados en cajas, desde hace años, han aparecido tres pequeñas hojas manuscritas y siete fotografías de Emilio Carreras, que hacen referencia a la "Colonia Amat de la Font del Ferro". Llevan fecha de 8 de agosto de 1929. Transcribo las hojas manuscritas.


"Cerca de Gavá (Barcelona) y en la carretera que conduce desde este pueblo a Begas, se encuentra otra que va hasta una pequeña colonia conocida por el nombre de "Colonia Amat de la Font del Ferro"


Integran dicho lugar una hermosa masía y varias pequeñas casitas. Dicha masía de antiguo estilo catalán fue fundada por D. Juan Amat y Ros en el año 1724. Las generaciones que han sucedido al fundador, procuraron siempre introducir mejoras de acuerdo con sus épocas pero conservando siempre el sello de masía antigua. El actual propietario es D. Juan Amat y Aymar, Presidente de la sección 2ª de la Audiencia Provincial de Barcelona.


Pertenecen a la antedicha colonia unas 250 hectáreas de terreno; la mayoría bosque donde abundan los manantiales sobresaliendo los del " Negre", "Mas Vila" y la "Font del Ferro"


Esta última recibe este nombre por contener su agua una buena cantidad de hierro.


En ella hay un bello y antiquísimo mosaico de la Virgen de la Salud de inapreciable labor.


A pesar de tratarse de una propiedad particular, la amabilidad del Sr. Amat permite que sea un lugar público, siendo lugar predilecto de muchos excursionistas, no sólo por la bondad de sus aguas sino también por la belleza de su panorama y la abundancia de pinares que lo convierten en un lugar sano y pintoresco.
Emilio Carreras".
PROCEDENCIA:
Archivo Joan Vendrell i Campmany