martes, 30 de noviembre de 2010

DIECISIETE MUERTOS Y OCHO HERIDOS GRAVES EN EL ACCIDENTE OCURRIDO EN EL PASO A NIVEL DE TORRE RAMONA, EN SUBIRATS (BARCELONA). (19 DICIEMBRE 1929)

El chasis del autobús siniestrado, matrícula T-3148 apareció a 200 metros del paso a nivel. (Foto: A. Marletti)Una de las víctimas del accidente (Foto: A. Marletti)

Identificación de los cadáveres (Foto: A. Marletti)
Tomando anotaciones del suceso
(Foto A. Marletti)

Traslado de los cadáveres al cementerio de Subirats.
(Foto: A. Marletti)




Autoridades y vecindario en el lugar del accidente.
(Foto: A. Marletti)





Los cadáveres ya identificados, en espera de la práctica de la autopsia, en el cementerio de Subirats. (Foto: A. Marletti)






Acto previo a la autopsia de los cadáveres.
(Foto: A. Marletti)







Las autopsias se realizaron al aire libre, entre los nichos del cementerio de Subirats. (Foto: A. Marletti)








Colocando los cadáveres en los ataudes.
(Foto: A. Marletti)









Autoridades y vecindario en el cementerio de Subirats.
(Foto: A. Marletti)











El conductor del autobús siniestrado, Magín Boqueras, que resultó con heridas leves, atendiendo en su domicilio de Vilafranca del Penedés a un redactor de "El Día Gráfico" (Foto: A. Marletti)

Desgraciadamente cada año, cuando se aproximan las fiestas de Navidad, acostumbra a ocurrir, en cualquier lugar del planeta, algún accidente que se cobra la vida de un determinado número de personas, y el luto y el dolor ensombrecen la alegría de aquellas fechas.
En mis archivos he encontrado unas fotografías del fotógrafo A. Marletti, de "El Día gráfico", que corresponden a la tragedia que vivió Cataluña en la mañana del día 19 de diciembre de 1929, cuando un autobús con capacidad para 30 viajeros, que cubría el trayecto de Vilafranca del Penedés a Barcelona y viceversa, resultó arrollado por un tren en el paso a nivel de Torre Ramona, en el término municipal de Subirats, en la provincia de Barcelona, y que se saldó con diecisiete personas fallecidas y ocho heridas graves de diversa consideración.
LA CAUSA DEL ACCIDENTE
El guardabarrera encargado de la vigilancia del paso a nivel de Torre Ramona era, en el momento de ocurrir el accidente, Arturo Benaiges, que suplía al guardabarrera habitual, que aquel día le correspondía descanso.
Cuando ocurrió el accidente, Arturo se encontraba en el interior de la casilla del guardabarrera, distante unos quince metros del paso a nivel, mirando por una de sus ventanas, en dirección a Gelida, atento a la llegada de un tren de mercancías que tenía su paso por aquel punto en aquella hora.
Este tren de mercancías, procedente de Barcelona, y el tren directo de Picamoixons, que colisionó con el autobús, se cruzaban ordinariamente en la estación de Sant Sadurní d'Anoia, pero resulta que el día del accidente, al ir con retraso el mercancías, se había calculado el cruce en Gelida. Por esta circunstancia, Arturo, creyendo que como de costumbre, el mercancías pasaría antes que el de pasajeros, no se preocupó de este último, esperando antes la llegada del otro, sorprendiéndole la catástrofe cuando aguardaba antes la llegada del tren de mercancías , y en consecuencia, con las barreras levantadas.
EL PARTE OFICIAL
El parte oficial que se recibió en el Juzgado de Guardia, decía lo siguiente:
"A las once y media ha llegado a esta capital el tren descendente de Tarragona número 46 que en el paso a nivel del kilómetro número 62, entre Gelida y San Sadurní de Noya arrolló a un ómnibus de viajeros que presta servicio entre Villafranca del Panadés y esta ciudad. Conducía a cuatro hombres y tres mujeres heridas y además a otra mujer que murió al entrar el tren en agujas. Los heridos han sido trasladados para ser curados en esta ciudad" (1)
(1) "La Vanguardia", viernes, 20 de diciembre de 1929, página 10.





sábado, 20 de noviembre de 2010

LOS REQUISITOS PARA EMPEZAR A TRABAJAR SIENDO MENOR DE EDAD. (AÑO 1960)

Anverso del tríptico
Reverso del tríptico

Terminados mis estudios de bachillerato, empecé a trabajar el día 1 de octubre del año 1960. Cómo que en aquel entonces no tenía todavía decidida la profesión que debía ejercer, a través de unos amigos de mis padres consiguieron colocarme en un taller de joyería situado en la parte alta de la ciudad de Barcelona, en horario de 09:00 horas a 13:00 horas y de 15:00 horas a 17:00 horas,(1) y de 18:00 horas a 21:00 horas acudía a la Escuela Industrial, para estudiar en Artes y Oficios la profesión de joyero, habiendo aprobado los dos primeros cursos, correspondiente a los dos años que trabajé en en aquella empresa, y que abandoné porque no acababa de satisfacerme aquella profesión.
Pero no se trata de referir aquí y ahora el "curriculum vitae" de mis actividades laborales, sino de comentar los requisitos que se precisaban para empezar a trabajar siendo menor de edad, como fue en mi caso.
En primer lugar tuve que ir al estanco a comprar un tríptico de la Inspección de Trabajo. Este tríptico contenía los tres certificados que exigía el artículo 16 del Reglamento para la aplicación de la Ley de 13 de Marzo de 1900, es decir, el PERMISO PATERNO, en el cual mi padre tuvo que comparecer ante el alcalde del municipio de mi residencia, para que éste diera fe de que me concedía permiso para efectuar trabajos industriales.
EXTRACTO DEL ACTA DE NACIMIENTO , que consistía en la certificación extendida por el Juez y el Secretario del Juzgado correspondiente -- en mi caso el Municipal número 8 de Barcelona -- de los datos de mi nacimiento, y finalmente, la CERTIFICACIÓN FACULTATIVA, en que el médico certificaba que había sido vacunado, que no padecía enfermedad contagiosa alguna y que me consideraba apto para trabajar.
Con este triptico debidamente cumplimentado por las tres partes, la empresa podía proceder a cumplimentar el correspondiente contrato de trabajo y a extender la correspondiente alta al Régimen General de Cotización a la Seguridad Social.
(1) Recuerdo que mi primer salario era de 50'00 pesetas semanales, y los gastos ascendían a 42'50 pesetas semanales, consistentes en el abono semanal para los desplazamientos en los Ferrocarriles Catalanes (actualmente Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya), de Sant Boi de Llobregat a Barcelona y viceversa, que suponían 35'00 pesetas semanales, a las que debían añadirse las 7'50 pesetas semanales del tranvía de la línea 54 que me trasladaba de la parada más próxima del taller de joyería a la Escuela Industrial. No tenía gasto de comida del mediodía porque acudía a casa de mi abuela materna, en la calle de Sant Medir, en la barcelonesa barriada de Sants, donde tenía un establecimiento de pesca salada.

sábado, 13 de noviembre de 2010

CUANDO LA PALABRA " ROJA" TODAVÍA ESCANDALIZABA EN SANT BOI DE LLOBREGAT (SETIEMBRE 1968)

Cruce de la Riera Roja con la carretera a Santa Cruz de Calafell(C-245) durante las obras, en 1968.
(Foto: Joan Vendrell Campmany)


Recuerdo que era un sábado de la segunda quincena del mes de agosto de 1968 que, estando cumpliendo el servicio militar en La Seu d'Urgell (Lleida), me habían concedido permiso de fin de semana para disfrutarlo en mi domicilio familiar. En aquella época seguía colaborando como corresponsal en el vespertino barcelonés "Tele/eXpres" y, en aquella ocasión, haciendo un recorrido por Sant Boi de Llobregat, municipio de mi residencia, me percaté de que en el cruce del vial que actualmente se denomina Ronda de Sant Ramón con la carretera de Santa Cruz de Calafell (C-245), unas máquinas excavadoras estaban efectuando unos movimientos de tierras. Me interesé para conocer en que consistían aquellas obras y el capataz me enseñó unos planos y me explicó que para evitar aquel peligroso cruce -- por el que se accedía a una de las zonas industriales-- se iba a urbanizar una plaza circular conforme aquellos planos, con la finalidad de facilitar una mayor fluidez del tránsito rodado y evitar los accidentes que con frecuencia se produicían en aquel lugar. Como sea que los fines de semana el Ayuntamiento estaba cerrado y la tarde del domingo tenía que regresar al acuartelamiento militar de La Seu d'Urgell, preparé, sin más, una pequeña información que el diario "Tele/eXpres" publicó en su edición del día 26 de agosto de 1968, bajo el título "NUEVA PLAZA EN S. BAUDILIO", y que textualmente decía:
"Se está trabajando de manera acelerada en la construcción de la plaza Roja, que está ubicada en la carretera de Santa Cruz de Calafell a su paso por la villa.
La finalidad de esta plaza, de forma circular, será la de regularizar debidamente el tráfico, mediante unos jardines y señalizaciones que desviarán el tránsito a sus respectivos ramales.
El hecho de que esta plaza sea denominada con el nombre de Roja, obedece simplemente a que, hasta la fecha de construcción de estas viviendas, en este lugar discurría la Riera Roja.
No se ha fijado todavía el plazo de apertura e inauguración, pero en vista de la celeridad con que se han emprendido las obras, podemos aventurar que será en breve".
Hasta aquí la noticia. Y yo no me enteré del revuelo que aquella noticia había causado en el Ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat hasta que algún tiempo después me lo comentó Ramón Rovira Salvatella, Jefe de la sección "Toda Cataluña" del referido periódico barcelonés. Me explicó que el alcalde de Sant Boi de llobregat, José Milá Gelabert, muy enfadado, les había mandado una carta en la que se quejaba, de una manera muy desproporcionada, por el hecho de que se había publicado que aquel lugar era la Plaza Roja. Otra cosa hubiera sido -- me explicó Rovira Salvatella -- que hubiera pedido una nota aclaratoria en el sentido de que aquella plaza no tenía todavía asignada una toponimia oficial, pero de ahí a arremeter como lo hizo, por el simple hecho de que había aparecido la palabra "Roja", medía un abismo. En consecuencia no se la publicaron
Pasados unos días, y en vista de ello, mandó llamar al periódico exigiendo su publicación. Para zanjar el enojoso asunto, "Tele/eXpres" se mantuvo en la postura de no publicarla, pero sí que le dió contestación en su edición del día 21 de setiembre de 1968 en estos términos:
"RESPUESTA AL ALCALDE DE SAN BAUDILIO DE LLOBREGAT.
Del alcalde de San Baudilio de Llobregat, don José Milá, hemos recibido una atenta carta, fechada el día 13 de setiembre, en la que expone su personal interpretación respecto a la nota aparecida en nuestro periódico el pasado 26 del mes de agosto, nota que, según afirma, ha llegado precisamente el día 13 a su conocimiento.
Han sido precisas casi tres semanas para que el señor alcalde se enterase de que nuestro corresponsal en aquella localidad había escrito que una plaza que estará ubicada en la carretera de Santa cruz de Calafell a su paso por la villa sería bautizada con el nombre de plaza Roja.
Señor alcalde nuestro corresponsal basa su afirmación en el hecho de que por aquellos andurriales discurría la llamada Riera Roja por lo que el pueblo la ha butizado con el nombre de plaza de la Riera Roja o plaza Roja, a falta de una denominación oficial que usted, en su carta, reconoce que todavía no tiene.
Señor alcalde, la palabra rojo o roja, no está excomulgada en España. Utilizamos incontables veces este calificativo para definir el color de la camiseta con que nuestros deportistas defienden nuestro pabellón en competiciones internacionales o de la franela de nuestros toreros cuando se mece al viento como una bandera, y nadie se escandaliza. Bien que no se bautice la plaza con el nombre de Roja, hemos sido muchas veces testigos de que algo se denomine contra la voluntad o el deseo popular, pero, por favor señor alcalde, no queramos hacer ver fantasmas donde no los hay.
R.R."
Una vez más, el Jefe de Protocolo del Ayuntamiento, Andrés Amat Amigó,contactó conmigo para recomendarme que, cuando terminara el servicio militar, que ya faltaba poco, estuviera algún tiempo sin pasarme por el Ayuntamiento. Que el alcalde estaba muy furioso conmigo y mejor sería que no me viera durante una temporada -- me aclaró.

domingo, 7 de noviembre de 2010

UNA NOCHE DE PATRULLA CON LA POLICIA MUNICIPAL DE SANT BOI DE LLOBREGAT (MAYO 1970)

Encabezamiento de la página dedicada a la Policía Municipal, en la revista local
"VIDA SAMBOYANA"

Plaza de José Antonio (actual Plaça de l'Ajuntament) en aquella época, con el edificio del Ayuntamiento en la derecha de la imagen.
En los últimos años de la década de los años 70 del siglo pasado, se había constatado un aumento de la delincuencia en Sant Boi de Llobregat, que especialmente incidía en la noche de los sábados al domingo.
Por aquel entonces se contaba con muy escasos medios para hacer frente a estas situaciones, y se suplía con la entrega, el esfuerzo y la dedicación de los efectivos que velaban para garantizar el orden público, que se resumía en cuatro números de la Guardia Civil con un Cabo-Comandante de Puesto y unos pocos agentes de la Policía Municipal.
El servicio se iniciaba a las 22:00 horas y finalizaba a las 06:00 horas del día siguiente. Normalmente lo efectuaba la unidad móvil número 2 con una dotación de dos agentes de la Policía Municipal y dos números de la Guardia Civil, y el vehículo iba provisto de un aparato transmisor-receptor conectado con Jefatura, situado en la planta baja del Ayuntamiento. El recorrido era de una media de 75 kilómetros por servicio y abarcaba la totalidad del área municipal.
Recuerdo que, ambicioso en narrar con todo detalle las incidencias de este servicio en la revista local "Vida Samboyana", en la sección "Policía Municipal... Policía Municipal... Policía Municipal... ", se me concedió la debida autorización y el sábado 23 de mayo de 1970, a las 22:00 horas me subí a la unidad móvil número 2 para acompañar a los dos agentes de la Policía Municipal y a los dos números de la Guardia Civil que estaban de servicio aquella noche.
Transcribo a continuación algunos párrafos que se publicaron en la revista local "VIDA SAMBOYANA"
"En el momento de la partida se está comentando la pelea habida en el parque de atracciones de la plaza de Calvo Sotelo. Uno de los participantes resultó con heridas de escasa consideración en el rostro. Se confeccionó el correspondiente atestado en el Cuerpo de Guardia del Parque y Talleres de Automovilismo de la IV Región Militar."
"En el cruce de las calles de Cervantes y Pablo Piñol, el turismo matrícula B-758.363 se estrelló contra la pared. Iba conducido por el teniente Agustín Nogales Benitez, de 53 años de edad que resultó con heridas graves, al igual que uno de los acompañantes, siendo trasladados por los agentes de la Policía Municipal al Hospital de San Lorenzo, en la vecina población de Viladecans"
Siguen otras pequeñas actuaciones que no refiero aquí y ahora, Más adelante figura "... se patrulla por el sector industrial y en la Plaza del Llobregat se observa un turismo "Seat-600 D" circulando a poca velocidad y que el acompañante del conductor lleva sujeta, por la ventanilla abierta, una bicicleta. Resultan ser unos accidentados, y en el asiento posterior del vehículo llevan la otra bicicleta colisionante. Se les advierte del peligro de circular en aquellas condiciones y se les indica que uno de ellos viaje en bicicleta para cubrir la corta distancia que les separaba de sus domicilios, en el vecino municipio de Cornellá de Llobregat".
"En la Plaza de Cataluña unos jóvenes están riendo alborotadamente en medio de la calzada, bajo los efectos del alcohol. Se les invita a que vayan a sus casas sin promover escándalo. Así lo hacen.
"En el sector "Cinco Rosas" los bares están llenos, pero se observa que hay absoluta normalidad. En aquel momento una moto circula con las luces apagadas y se le da alcance. Su ocupante, un joven de 18 años de edad, carece de documentación y sólo lleva encima una partida de nacimiento. Dice no saber leer ni escribir y residir en "Can Pere Bori", un antiguo caserón de Gavá habitado por familias de etnia gitana. En el interrogatorio es sorprendido con varias contradicciones. Lo llevan detenido a Jafatura. Piden antecedentes a la Guardia Civil de Gavá y le toman fotografías. Luego queda en libertad".
"A la altura del puente de "Can Diví" un turismo "Gordini" circula con un solo faro y a gran velocidad. Se le sigue y detiene más adelante. Lo conduce un joven acompañado de dos personas mayores. Los papeles están en regla y no se le observan signos de alcoholemia. Justifica la velocidad porque acompaña a aquellas personas a coger un autocar para ir a Andorra y van con el tiempo justo. El faro tiene un cable suelto. Con un puñetazo se enciende. Lo ha de llevar al taller para que lo arreglen. Se les deja seguir la marcha con la recomendación de que respeten el máximo de velocidad permitido en zona urbana".
"En la Rambla se observa a un hombre tendido en el suelo. Se interesan por su estado. Estaba durmiendo:
-- ¡Hola!, ¡Viva España!-- dice cuando lo despiertan.
Le invitan a levantarse y marcharse, indicándole que la calle no es sitio para dormir."
"En la Plaza Calvo Sotelo se sorprende a un grupo de jóvenes de llevan botellas de vino, unas cajas de cerveza, coñac. champán, pan y butifarras. Dicen que van a despedir la marcha de uno de ellos a la "mili" (Servicio Militar). Se les advierte de que no hagan escándalo. Dicen ir a la montaña precisamente para no molestar al vecindario."
Se vigila también la zona agrícola, porque son frecuentes los hurtos de frutas y hortalizas. Se sorprende a cuatro indivíduos andando y comiendo habas. Como que son pocas las habas que llevan en los bolsillos se les advierte que la próxima vez que se les soprenda por aquellos caminos con productos ajenos, serán detenidos."
"En la carretera C-245, a la altura de "Can Dubler" circula una moto con dos indivíduos que resultan sospechosos. Se les para y requiere la documentación del vehículo. No la llevan. Dicen que se la han prestado en Barcelona. Los agentes toman buena nota de todos los datos para efectuar las debidas comprobaciones". (1)
Estas fueron algunas de las actuaciones habidas aquella noche. En la página de "VIDA SAMBOYANA" explicamos con mayor detalle las conversacones habidas entre los agentes y los posibles infractores, pero que obviamente aquí y ahora no hemos relacionado por motivos de espacio.
(1) "VIDA SAMBOYANA", número 175. Junio 1970, páginas 18, 19 y 24.